La pequeña kajira despertó en el alba goreana, se incorporó en las pieles y comprobó que sus hermanas aun dormían "sonrió".
Con sigilo para no despertar a sus bellas hermanas, cogio la gruesa cadena que pendía del collar que ceñía su cuello para no hacer el más mínimo ruido.
De puntillas salio de allí, al pasar ante la estancia del Amo... "sonrió" se atrevió a mirar hacia dentro, allí estaba el Guerrero descansando placidamente aun.
Estaba acompañado por una de sus hermanas que reposaba su cabeza sobre EL vientre del Guerrero mientras, El, le acariciaba su cabello.
Se fijo en la expresión en el rostro de la kajira y era de plenitud y placidez y pensó sonriendo que quizás ella algún día tuviese ese mismo gesto en su alma y en su rostro de esclava.
La esclava se asea y peinando su largo cabello negro con sus dedos lo aúna y sube atándolo con una koora y va apresurada a cumplir con su primera labor del día, traer agua fresca para calmar la sed del Amo y para su aseo.
Se recuesta por unos instantes en el marco de la puerta, cierra sus ojos y piensa si hoy aparecerá el Guerrero que se digno a hablarla ayer preguntándola quien era su Amo.
Siente la brisa de la mañana entrar por cada poro de su piel de esclava, como sedosos hilos de su cabello, revoletean ante su rostro por su agitada respiración y como su cuerpo se eriza y humedece de solo pensar volver a ver al desconocido y apuesto Guerrero.
No pierde un enhs mas, sonriendo va por las vasijas para transportar la fresca agua. A lo lejos la ciudad despierta, oye las risas de los guerreros que amanecieron complacidos en la taberna al compás de dulces citaras, las primeras voces de los mercaderes voceando sus mercancías.
Se fija la muchacha en el limpio y verde prado, en el luminoso e impoluto cielo que tiene antes sus ojos y piensa lo afortunada que es por estar rodeara de tanta belleza y armonía. Se detiene un momento al ver una flor de esclava una "Dina" la toma y la prende a su cabello bajo su pequeña orejita.
Se siente hermosa y se apresura a llegar al cristalino rió observando disimuladamente por si atisba rastro del imponente guerrero tras algún seto. Se arrodilla y refresca un poco su excedido rostro intentando mantener la calma.
Su rudo camisk se adhiere a su voluptuoso cuerpo revelando aun mas sus curvas y su aterciopelada piel "sonríe picara y piensa...ojala este mirando ahora el desconocido Casta Roja". Se afana en llenar los recipientes de agua cuando tras de si, oye pasos y una voz masculina decirle...kajira eres el mas bello objeto que cualquier Amo desearía poseer. "Añadiendo” ven aquí esclava.
La kajira se arrodilla cerquita del Amo temblando, mezcla de excitación y de temor a lo desconocido sin abandonar su sonrisa, oyendo al Amo decir...eres mía esclava, me servirás, vendrás conmigo ahora. Sígueme.
La muchacha oye en silencio pero muy inquieta el silbato del Amo llamando a su Tarns y pronto ve al gran pájaro negro del Tarsman posarse majestuoso cerca y al Amo acercarse y subir en el.
Acércate kajira, no temas, súbele miedo la paralizaba ante tan gran animal, cuando oye la furiosa voz del Amo llamarla por segunda vez...muchacha, harta, rápido, sube, ¿o prefieres que mi fiel Tarn te lleve en sus garras?.
Subió sin pensarlo y se coloco entre las piernas del Amo, sintiendo como su miedo desaparecía al sentir el calor y la protección del fuerte pecho del Guerrero en un espalda, sus brazos rodearla y su aliento como fuego en su nuca.
Volaron casi toda la jornada, el Amo estaba callado absorto en sus pensamientos, solo hablo para preguntarla si tenia hambre al tiempo que sacaba de su zurrón un trozo de pan, pero la esclava solo sentía como cambiaba su vida y como sus deseos de entrega crecían a cada instante con el Amo.
Llegaron al atardecer a su destino,Los Jardines de Ar, la esclava pudo percibir que era una hermosa ciudad con valerosos Guerreros Castas Rojas, "sonrió" fue conducida en seguida a presencia del Herrero que con su magistral y certero trabajo y con la ayuda de los Reyes Sacerdotes la desprendió del collar de acero que abrazaba su cuello.
El Amo la cubrió por completo en unas pieles y transportándola en su fuerte hombro la llevo a su hogar. La esclava miraba todo con curiosidad y tierna sonrisa aun no teniendo muy claro si aquel era su destino, sentía una serena felicidad y una dulce excitación.
Cuando oyó al Amo decirla... Toma tu ración de gachas, aséate y aceita y unge tu cuerpo con frescos aromas, esta noche me darás calor en mis pieles. Quedo sola y tras unos momentos de no saber que hacer...
Tomo un baño y procedió a ungir cala milímetro de su piel, sus largas y bien contorneadas piernas, sus nalgas, su vientre, sus turgentes senos y todo su cuerpo como el Amo le había ordenado, sin poder reprimir y disfrutar del fuego y la pasión que la abarcaban en ese momento.
Busca con su oscura mirada un camisk o algo con lo que poder cubrirse viendo solo una delicada seda roja a modo de pañuelo, comprendiendo en ese momento que el Amo la dejo elegir donde colocarla, la toma en su mano."Sonreía".
Se dirigió a la estancia del Amo con el único vestido del reflejo de las tres lunas sobre su cuerpo y la pasión reflejada en sus centelleantes ojos que le daban una apariencia, felina, desafiante, lasciva.
La esclava se arrodilla a la entrada de la estancia, apoya sus suaves nalgas sobre los tobillos y separa con delicadeza los muslos...disfruta por un segundo con la exquisita caricia de la brisa en su entrepierna desnuda...
Flexiona su cintura despacio posando las yemas de sus dedos en el suelo rozándolo con su frente y sus pezones...sienten resbalar su negro cabello por su figura hasta el suelo, que besa... con sus rojos labios, pidiendo en un susurro permiso al Amo Goreano para ir a sus pies.
Siente mil corrientes que la recorren, camina encendida de pasión y felicidad, sintiendo como se sensibiliza todo su cuerpo de kajira y va brotando su sensualidad en cada paso que la acerca al Amo entre sugerentes contoneos...
Sus pasos son suaves, elegantes, provocativos, hacen balancear su cabello a su espalda y cosquillean sus desnudas caderas, sus muslos brillan a la luz de la lumbre donde se encuentra el varonil Guerrero recostado.
Avanza pausadamente hasta su Señor ofreciéndole su figura, su piel, tersa, suave, incendiada y resplandeciente como todo su ser."Sonríe orgullosa” se arroja pausadamente recogiendo su melena y dejándola reposar sobre su hombro derecho, y acercándose sensual y entregada a sus pies apoya sus encendidas mejillas por un instante y los besa con devoción."Sonríe".
El Amo le pide unas uvas de Ta que prepara y limpia con esmero en un cuenco, pero al estar denuevo en presencia del Amo en nadu...Este le pide que se las sirva desde su cuerpo sin usar las manos, y se dispone a hacerlo.
Va colocando las uvas una a una despaciosamente con toda su picardía en zonas de su cuerpo donde sabe que el Amo las tomara gustoso, en su clavícula "sonríe atrevida” la ofrece al Amo, se coloca una uva entre los dos senos..."sonríe" con toda la malicia que puede... y la ofrece al Amo.
Repite la operación provocadoramente, en su ombligo, sus nalgas, sus corvas y la ultima la reserva para servirla desde sus palpitantes labios jugueteando con la lengua del Amo.
Cuando le oye con voz bronca pedirla... que le sirva paga como ninguna kajira se lo sirvió hasta hoy.
Toma la bota del fuerte licor especiado "sonríe descarada mordiendo su labio inferior" y en un hilo de voz le pregunta al Amo si lo desea a la temperatura del cuerpo de la esclava.
El Amo asiente cuando lo oye decir...kajira tu belleza hace opacar las tres lunas de gor, "siente intensos escalofríos de pasión que la abrazan pero no para de sonreír".
Abre la bota de paga con sus pequeños dientes sintiendo por toda música su pequeño corazón latir acelerado y el crepitar de la hoguera y vertiendo unas gotitas en su pezón...lo acerca a la boca del Amo, notando como la enlaza por la cintura y la atrae al cuerpo del Guerrero.
Repite la operación con el otro pequeño pezón acaerdandolo de nuevo al Amo sin poder reprimir un pequeño gemido de placer al contacto con su lengua de Hombre.
La suelta el Amo y la invita con la mirada incendiada de deseo a que continué con el servicio. Se tiende en el suelo boca arriba levantando su pelvis.Vierte rojo paga en el sexo de la kajira totalmente embriagada de pasión y lo ofrece al Amo acercándolo a su boca.
Amo esta kajira le ofrece su paga a temperatura de la tibieza de su cuerpo deseando que sea de su agrado y quede complacido."Sonríe, toma aire, humedece sus labios y siente el inenarrable contacto de la boca del Amo beber de ella".
Ve como el Amo se levanta y la ofrece el vino de esclava, ordenándole que se recueste reposadamente. El Amo la mira de cabeza a pies detenidamente y metiendo un pie entre los suyos la hace un gesto para que abra sus piernas, va dejando reposar su cuerpo de fornido Guerrero sobre el de la esclava.
Siente en la espalda el contacto de las pieles, los brazos de su Dueño ciñéndose alrededor de su delicado cuerpo.
Su mirada la traspasa y su boca la besa con lascivia. Gime y toma aire mientras acacia los fuertes hombros de su Amo aforrándose a ellos en el momento es que es... con fuerza penetrada y siente toda la hombría de su Amo entrar en ella y poseerla hasta robarle la razón.
Me ofrecía a mi nuevo Dueño con mi respiración entrecortada sin parar de sonreírle desafiante. Sintiendo inmenso placer por ser Suya, con un solo movimiento más me conduciría a la experiencia sexual más increíble y fantástica que puede sentir una mujer.
Se sentía...sometida por completo por su Amo, deseada, vivia intensamente el momento en que su Amo la usaba arrebatado de deseo, disfrutaba de los espamos y los movimientos ritmicos, energicos que su Amo imprimia en ella sin pausa.
Orgasmo de esclava. Su cuerpo se entregaba, se abría convulsionado y ofrecía su propio placer a su Dueño.
La kajira alcanzaba la cumbre de su entrega, de su razón de ser, de su existencia. Había sido tomada por su Amo.
Recordó el dulce gesto de felicidad de la mucha que yacía con su anterior Dueño, sonriéndose pensó, allí, entre los brazos de su Amo que su rostro seguro que era aun más resplanciente en aquel nuevo alba coreana en la que había vuelto loco de placer a su Amo.
Se abrazo a su Amo y sin poder reprimir su voz que salía directa desde su corazón esclavo diciendo a su Dueño...mi Amo esta esclava le amasa Amo sonrió y con voz pausada, dijo...kajira mañana volveremos al Herrero y haré de tu cuello el hogar de mi collar.
Te llevare después a los jardines de Ar y recibirás allí educación de seda roja para dar placer a tu Amo, solo a tu Amo.
¿Amo y cual será mi obligación?
El Amo la mira embelesado, serio, diciéndole....Belleza Exquisita y Obediencia Absoluta.
Sonrió agradecida, sus labios, entreabiertos, dejaban un leve resquicio a fantasías prohibidas e innombrables y cerrando los ojos abrazada a El pensó que Una kajira debe guardar muchas cosas para su Señor...sorpresas que alegren el día a día.
Sonrisas que reconforten una dura jornada, miradas que den paz al alma agitada, caricias que hagan volar la imaginación, olores que inspiren a las confidencias, paciencia que de valor al tiempo, respeto hacia los actos de su Señor, Amor para acunar los sueños.
Pasión para alborotar los sentidos, fuego para mantener prendido a su Amo, humor para afrontar los designios de las lunas...pero sobre todo y por encima de todo debe guardar magia, magia en su interior, magia que la haga sobrevivir y la convierta en ese sueño buscado, anhelado y encontrado de su Amo.
yasmin de Seiduna
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